viernes, 15 de enero de 2010

Una milagrosa oración: La oración de Jabes


Todo libro en la Biblia tiene una razón específica de por qué se encuentra ahí. Y con el primer libro de Crónicas pasa algo muy particular. Habla de los descendientes de Adán hasta Abraham... Y así pasa una buena parte. Pero cuando llegamos al cpítulo 4, versículo 8, nos encontramos con esto:

"Cos engendró a Anub, a Zobeba y a los clanes de Ajarjel hijo de Harum. 9 Jabes fue más ilustre que sus hermanos. Su madre le llamó Jabes,diciendo: "Porque lo di a luz con dolor." 10 Y Jabes invocó al Dios de Israel diciendo: "¡Oh, si realmente me dieras bendición y ensancharas mi territorio, y tu mano estuviera conmigo y me libraras del mal, de modo que no tuviese dolor!" Y Dios le concedió lo que pidió."

El texto continua .... De la misma manera:

"1 Quelub, hermano de Suja, engendró a Mejir, el cual fue padre de Estón. 12 Y Estón engendró a Bet-rafa, a Paséaj y a Tejina, padre de la ciudad de Najas. Estos son los hombres de Reca (...)"

Quién era Jabes? Que tenía de diferente este hombre, para que Dios le concediera sus peticiones? La única alusión a él es ésta, que encontramos en el versículo anterior. Lo que si tenemos muy claro es que tuvo que ser un gran hombre, muy bendecido, porque cuando el escritor llegó hasta su nombre para ponerlo en la lista, recordó que fue un hombre sobresaliente en tal manera, que merecía una mención especial. Su nombre significaba "angustia" ya que su madre "lo dió a luz con dolor". Empecemos por ahí. ¿Cúantos de nosotros, tenemos cadenas, y decretos que alguien ha puesto encima nuestro, los cuales creemos que siempre llevaremos encima? Todos. Creo que no hay una persona que no haya sido criticada por otra, injuriada o calumniada. Sean conocidos, o familiares. Llegamos al punto de creer que puede que lo que digan es verdad, y eso nos limita a salir adelante en muchas cosas, que es precisamente lo que el mal quiere que nos pase. Que nos creamos encadenados, limitados, tristes. Pero Dios por medio de Jesús nos dió libertad. Tienes que declarar todos los dias que no estas derrotado, mucho menos vencido. La Biblia dice que "En todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó." ( Rom 8, 37 ). "Angustia" Fué su nombre, pero decidió vivir en prosperidad. ¿ Cómo ?

Analicemos un poco la oración de él... y veamos que pudo haber hecho que Dios se lo concediera.

1.- "Ensancharas mi territorio"

Esto lo podemos interpretar de mil maneras. No sabemos las circunstancias de la vida de Jabes, pero si sabemos que salio victorioso de todas ellas. Ensanchar mi territorio puede ser prosperar mi trabajo, o conseguir un mejor empleo; Permitir desarrollar eso que tan bien hago en un campo mucho más amplio. Darme más tierras para cosechar. Conseguir un techo propio. Engrandecer en gran manera mi ministerio. Establecerme como señor o señora en mi matrimonio, quitando toda infidelidad o infelicidad de mi hogar. Encontrar personas con ideas afines con quienes dejar atrás mi soledad. Ensanchar mi paz, mi fé, mi salud.... TODO. Muy amplia.

2.- " Y tu mano estuviera conmigo"

Esta parte de la oración de Jabes habla por si misma. La mano de Dios sobre nosotros para mí sería la toma de decisiones correctas que me lleven no solo por un buen camino ante los ojos de él, sino a la paz, al gozo, a la prosperidad. Y para vos?

3.- " Y me libraras del mal"

El mal se manifiesta de muchas maneras a lo largo de todo el día. Lo vemos, lo escuchamos.. Pero no tenemos que conformarnos con ello. Dice 1 Pedro 5,8 : "Vuestro adversario, el diablo, anda
al acecho como león rugiente, buscando a quien devorar" . Nosotros tenemos un Dios poderoso que nos cubre de todo mal, y nos guía para tomar decisiones correctas. Pero debemos buscarlo, y pedírselo, con fe. Dios le concedió a Jabes librarlo de todo mal. En otras palabras, siempre el bien estuvo presente en su vida.

¿Qué estas ( estamos ) esperando entonces? Todos deberíamos incluir en nuestras oraciones diarias esta oración de Jabes, y andar conforme a los deseos de Dios. El único lugar para encontrar refugio verdadero es en Cristo, en Dios mismo. Dice el salmo 91 "El que habita al abrigo del Altísimo morará a la sombra del Omnipotente" . Y YO quiero estar en esa sombra, donde hay calma, paz y amor. Y se que todos lo deseamos también. Recuerden que para Dios no hay imposibles. Bendiciones!

( Foto tomada de www.ze.cl/betanzo/images/la-mano-de-dios.jpg )

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